“Al no prepararte, te estás preparando para fallar”. – Benjamin Franklin
Hola, espero que lo estés haciendo lo mejor posible.
Algunas confesiones antes de comenzar: tengo cero experiencia formal en el mundo del periodismo. Cero. Ninguna. Lo que sí tengo son miles de horas de experiencia haciendo entrevistas (que llamo conversaciones), escuchándolas y editándolas.
Hace cuatro años, mientras viajaba en mi bicicleta hacia el trabajo desde la 147 hasta la 98 en Bogotá, escuchando un podcast tuve lo que la mayoría de la gente identifica incorrectamente como un momento Eureka. Es decir, miles de pensamientos diferentes y billones de conexiones que se habían estado marinando en mi materia gris durante varios años, de alguna manera se conectaron en una fracción de segundo.
La idea:
Comenzar un podcast entrevistando en español a líderes creativos en LATAM, en una estructura de formato largo (1.5-2.5 horas en promedio), y compartirlo con el Mundo.
Razones
- Quiero hacer una maestría, pero no quiero invertir dinero y no tampoco tengo tiempo para dedicar, así que construiré mi propia maestría. Maestría de la calle en la que elegiré a mis profesores, yo mismo seleccionaré las preguntas y como tesis, publicaré un podcast.
- Nadie está celebrando a la gente de LATAM que está cambiando el mundo, así que ¡Lo haré yo!
- Solo había otra persona en ese momento haciendo algo similar.
Eso fue hace cuatro años y hace más de 150 conversaciones. Aquí quiero compartir lo que he identificado como aprendizajes transversales, conceptos que, en mi humilde opinión, son los más emocionantes, aplicables y únicos.
Los siguientes son tres pensamientos, herramientas, y teorías principales que uso para mi podcast que las personas pueden aplicar para construir conversaciones poderosas.
“La conversación debe tocar todo, pero debe concentrarse en nada.” – Oscar Wilde
Herramienta 1: Apple Book
Tuve el privilegio y el honor de trabajar cinco años para Apple. Todos los días esperaba tener conversaciones fantásticas con personas brillantes. Esto fue más fácil en la primera tienda donde solo había 30 empleados. Se abrió aproximadamente tres meses antes de que el iPhone existiera en el mundo.
Esto se volvió un poco más complejo cuando me fui a la tienda de SF. En esta tienda había cerca de quinientas personas. Sin embargo, Apple no es una compañía ordinaria, por lo que tenían una solución creativa.
El comedor era un “libro” con más de 300 páginas de información sobre cada empleado de la tienda. Antes de comenzar a trabajar, Apple le pide a cada trabajador que le proporcione un documento de una página, diseñado con herramientas de Apple, y con la información que desea compartir sobre él.
Durante el almuerzo, pasaba unos minutos leyendo este libro con amigos. Fue increíble! Un tipo era piloto en Brasil, otro, baterista en tres bandas (eventualmente se convirtió en un mejor amigo), otro un ex fotógrafo de ESPN, otro hablaba ocho idiomas, otro tenía cinco gatos, y así sucesivamente.
Cada página estaba repleta de razones para entablar una conversación con otro ser humano con el que nunca harías un esfuerzo para hablar. Yo uso “hacer el esfuerzo” con un propósito extremo. Se necesita un esfuerzo para iniciar, mantener y culminar una conversación con cualquier persona.
Gracias a este libro en Apple pude absorber una lección que me sigue alimentando todos los días: ¡Cada persona es notable, incluso si no se da cuenta! También está evolucionando regularmente y, por lo tanto, constantemente está agregando cosas nuevas y divertidas a quien es como persona.
Desafortunadamente, las personas no caminan con carteles bien diseñados alrededor de sus cuellos, mostrándole a todo el mundo lo que las hace memorables. Y cuando la mayoría de las personas interactúa con otras, tienen motivos alternativos como, ¿qué puede hacer esta persona por mí?
La lección:
Si quieres una conversación poderosa, encuentra algo especial para ti sobre tu invitado. Siente curiosidad por él, pregúntale, escúchalo y hazlo sentir tan especial como realmente es. Si haces esto, nunca puedes fallar en una conversación.
“La conversación, como ciertas partes de la anatomía, siempre funciona más suavemente cuando se lubrica.” – Marquis De Sade
Herramienta 2: Sherlock y Einstein
Esta es mi secuencia para investigar invitados. Sigo este mismo proceso antes de todas las conversaciones con mis invitados del podcast, así como con mis clientes.
- Googleo al invitado. Recuerda, si usas la palabra “invitado”, estás consolidando en tu mente la regla número uno: Esta persona es especial. Así que busco algunas piezas de información específicas entre los resultados de Google como cuántos hits, las fechas de los resultados y las fuentes.
- A pesar de que algunos de mis invitados son importantes, no se encuentra casi resultados. Esto me dice que respetan su privacidad y que necesito manejar la conversación con eso en mente.
- Si aparecen en imágenes, escojo entre una y veinte para hacer click. Me interesa quién es la fuente, así como quién las consideró suficientemente relevantes como para compartirlas. Si se trata de información, busco la repetición y, a medida que mi curiosidad comienza a acumularse, busco agujeros en los datos. Específicamente, estoy buscando lo que los hace únicos y donde otros no se han dado cuenta.
Si mi invitado no tiene una cuenta de LinkedIn, esto podría revelar lo siguiente:
- Ha tenido la misma posición durante ocho años o más, y nunca ha sido necesario crear una cuenta de LinkedIn. CEO’s, negocios tradicionales, etc.
- Tiene un trabajo o empresa que funciona por fuera del mundo de los negocios. Chefs, Artistas, Músicos, etc.
- Todavía no ve el valor de tener una cuenta o no sabe qué valor podría tener LinkedIn, o simplemente no le importa. Esto revela mucho.
Si tiene una cuenta de LinkedIn, busco la siguiente información:
- Qué, cuándo y dónde ha estudiado. Esto me dice mucho sobre los ingresos, la familia y los cambios de carrera. Hay conversaciones enteras que he tenido sólo en tres puntos de esta área en LinkedIn.
- Si es un gran usuario de LinkedIn, miro su actividad para lo siguiente:
¿Qué está publicando? ¿Sólo publica o comparte opiniones? Cada comentario me proporciona información sobre algunos modelos mentales que me gustaría explorar o probar en la conversación. Si repostea mucho, esto muestra qué alianzas o amistades valora lo suficiente como para compartir. - Todo lo que comparte muestra algo sobre lo que siente que es convincente. ¿Es diverso o está claramente definido?
Twitter es mi favorito si se trata de un usuario recurrente.
- ¿Publica, comenta o vuelve a repostear más?
- ¿Cómo reacciona?, ¿a qué reacciona y con qué frecuencia?
Esto me proporciona una gran comprensión de lo que lo mueve emocionalmente, dónde se encuentra en política, negocios y vida.*
*Este tipo de personas es difícil de encontrar. Sus tweets también suelen aparecer en la búsqueda de Google desde el número uno mencionado anteriormente.
Instagram & Facebook
Instagram es donde encuentro qué define los límites de su vida. Instagram está impulsado por el ego y, por lo tanto, es poco probable que proporcione información. A veces puedo averiguar sobre la familia, los lugares a los que viaja, lo que está vendiendo o la comida que disfruta.
Facebook trato de evitarlo como la plaga, porque no me gusta, y generalmente puedo encontrar la misma información en Instagram.
Personas
¡Personas! Esta es, de lejos, la mejor fuente y siempre (con alta probabilidad) la menos utilizada. ¡Pregúntale a alguien! Pregúntale a un amigo o compañero de trabajo. ¿Sobre qué historia debería preguntarle? ¿Qué es lo más inspirador de él? ¿Qué lo hace extra especial? ¿Alguna idea de lo que le gusta?
Finalmente, hazle a tu invitado una serie de preguntas de antemano. ¿Cuál es su sonido favorito? ¿Cuál es su palabra favorita? Si pudiera vivir en cualquier lugar durante 24 horas, ¿dónde viviría?, etc.
La lección:
Investiga a tu invitado Sherlock. ¿Por qué? Debido a que le estás pidiendo un poco el único recurso que una persona nunca puede aprovechar más: tiempo Einstein. Al mostrarle que investigaste y al valorar su tiempo, ahora le estás mostrando que es especia.
Si alguna vez alguien te ha hecho una entrevista y se ha preparado, sabes que es un sentimiento glorioso. Por experiencia te cuento, esto casi nunca sucede.
“Los detalles importan. Vale la pena esperar para hacerlo bien.” – Steve Jobs
Herramienta 03: Diamantes y detalles
Cada uno de mis invitados o clientes tiene algo que me gustaría aprender. No les pido su tiempo para hacerles una serie de preguntas. Estoy allí para escuchar historias e interactuar con ellos.
Estoy allí como participante activo. Estoy buscando un intercambio de ideas y no una entrevista. A veces el invitado llega completamente pulido. Es decir, proporciona detalles y anécdotas encapsulados en fragmentos de sonido perfectos.
Otras veces, los detalles están ocultos profundamente, y ninguno de nosotros es consciente de qué cosas gloriosas podríamos aprender. Estos detalles son los que mueven la entrevista a una conversación. Estos detalles son la conversación.
¡Haz brillar a tu invitado! Ese es el único trabajo que vos, como persona que hace la invitación e inicia la conversación, debe hacer: convertir a tu invitado en una estrella. Haz que se sienta como el individuo más importante del planeta durante la conversación.
La lección:
La única forma en que puedes hacer brillar a tu invitado es participando en la conversación. Debes estar libre de distracciones, escuchar activamente, buscar detalles y luego participar. Juntos, tú y tu invitado y las facetas ocultas comenzarán a revelarse lentamente.
“Un buen viajero no tiene planes fijos y no tiene intención de llegar.” – Lao Tzu
Para concluir:
Cómo tener conversaciones poderosas:
- Encuentra algo especial en tu invitado que te gustaría aprender.
- Muéstrale que es especial. Ahora que tienes una conexión emocional con tu invitado, ¡es hora de mostrarle! Investiga, respeta su tiempo y demuéstrale que le importa.
- Participa en la conversación. Ahora que te sientes especial y él se siente especial, ambos pueden trabajar hacia una conversación poderosa.
Bono:
Mi preparación de conversación simplificada es la siguiente:
- Tengo una obsesión curiosa por mi invitado.
- Investigo, hago una lista de lo que me gustaría aprender y que puedan compartir.
- Llevo un regalo. Siempre llevo agua, café y, si es posible, algo especial.
- Construyo la secuencia de preguntas por la que me gustaría pasar, memorizo la mayor parte y luego me olvido de ella.
- Cuando entro en la conversación, solo estoy yo, el agua o el café, y los micrófonos. No traigo notas, ni bolígrafo, ni papel. Mi atención solo tiene un foco, mi invitado.
Ejemplos:
Cuatro conversaciones que puedes encontrar interesantes como experiencia analítica y emocional:
Pamela Chávez: Pamela es una de las personas más brillantes que he conocido, trabaja en un campo dominado por hombres y ha roto casi todos los paradigmas que te puedas imaginar. Esta conversación es larga, más de 3 horas, pero es mágica. Casi no hay información sobre Pamela. Entré en la conversación con solo fragmentos de información. El 100% de curiosidad fue lo que hizo especial al podcast.
Simón Borrero: Esta conversación es uno de los podcasts más populares que he producido. Este podcast brilla porque hago preguntas que otros se perdieron o no parecían tan relevantes. También profundizo en los detalles. Esta conversación es 100% detallada.
Diego Parra: No hubo preparación para este podcast, fue mi primer podcast y sigue siendo uno de los más populares. La razón: Diego es mi mentor y amigo, y fue una conversación sobre comida, vino y cigarros.
Alejandro Gaviria: Alejandro es un monstruo intelectual. Tiene una multitud de libros, tiene más logros de los que puedo contar y miles lo respetan. Fuera de mi liga pero aún así, una conversación porque seguí mis reglas.
Siempre puedes ganar más dinero, pero no más tiempo. Gracias por leer.